La felicidad, aquello que todos queremos alcanzar y saborear. Dime, ¿Eres feliz por ti o solo sigues los modelos impuestos por la sociedad? A lo largo de la historia ha habido diversas formas para “ser feliz”. Actualmente se relaciona la felicidad con tener mucho dinero o tener amigos y buena salud en nuestros seres queridos. Ciertamente, son factores que pueden afectar en la felicidad de cada uno  pero ¿Por qué se relacionan con ella? ¿Están estos elementos incluidos en los modelos de la sociedad contemporánea? A continuación vamos a poner y analizar diversos modelos de felicidad en la sociedad contemporánea para que juzguéis vosotros mismo y digáis con que estáis de acuerdo y que no os parece tan acertado.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Aquí tenemos el primer y principal modelo que nos da la sociedad, compuesto por tres factores que juntos nos pueden dar ese boom de felicidad. Normalmente lo enseñan juntos pero hay veces que se centran más en una de las partes e ignoran las demás.

 

Belleza.                                                                                                                                                                                               Mucha gente piensa que obtendrán la felicidad cuando se vean guapos/as a través de los ojos de los demás. Estos se debe a que la misma gente (nosotros, por desgracia) respetan más a una persona guapa que a una fea o con algún “defecto” visible: nariz o orejas grandes, ojos pequeños, etc. ¿Y por qué es así? Principalmente porque la gran mayoría de los famosos/as son personas bellas, o tienen buen cuerpo. Por otro lado están las/los modelos, que a pesar de que no algunas veces no sean muy agraciados, las personas siempre se fijan en sus cuerpos, a pesar de que las modelos muchas veces rozan la anorexia.

 

Ver que la gente que ha “triunfado” en la vida tiene estas características físicas afecta especialmente a jóvenes, que acaban creyendo que para ser feliz como se ve a los/las famosos o simplemente para ser aceptado en la sociedad, hay que ser guapo y/o tener un buen cuerpo para que el resto pueda reconocerlo y admirarlo.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Bienes materiales.                                                                                                                                                                           Conseguir la felicidad a través de los bienes materiales es algo impuesto principalmente por el consumismo. Cosas tan simples como tener una casa grande hay quien lo relaciona con que a esa persona no le falta de nada y por lo tanto, es feliz. Otros se fijan más en los objetos y/o la ropa que uno lleve. Si llevas una marca o móvil caro, está claro que tu estatus es mayor y también eres feliz. La gente es feliz con bienes materiales que otra gente con menos nivel económico que no se lo puede permitir, porque les hace sentir superiores y pueden fardar de tener ese objeto. Como ejemplo, tener algo limitado como la versión deluxe de un CD te puede hacer feliz, tal vez solo durante un tiempo, pero te hace feliz. Y las ventas se deben a eso, a hacer creer a la gente que al comprar lo que se vende será feliz.

 

Igual que se cree que la felicidad se debe a objetos caros, también se atribuye a tener una gran cantidad de ellos                    independientemente del valor, porque aunque valgan poco, el hecho de tenerlos ya es algo de lo que te debes alegrar.                           El resumen de los bienes materiales se podría centrar en solo una palabra: dinero.  Según este modelo, los bienes                                 materiales dan la felicidad y para tenerlos, antes has de tener dinero, con lo cual el dinero da la felicidad.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Vida social.                                                                                                                                                                                                      Esto va directamente dirigido a los amigos. Muchos creen que tener una cantidad elevada de amigos les hará felices por ello de “los amigos son otra familia”, “los momentos más inolvidables son con amigos” y cosas así que ponen por las nubes el hecho de tener muchos amigos. Pero ojo, que pasa lo mismo con el amor. Si no tienes pareja te sientes vacio, no eres realmente feliz y siempre andas buscando a esa persona especial, o eso dicen. La parte de la sociedad que cree en esto como forma de felicidad pierde su identidad, ya que para gustarle a todo el mundo y ser aceptado cambia su forma de ser,  y así se crean falsas amistades.

 

Por otro lado está el tema de las relaciones con grupos externos a tus amigos, es decir, irte de fiesta a un sitio o a otro, hacer esto o aquello, etc. Lo que se podría resumir en seguir las modas. Si no vas a x discoteca eres un pringado y si ni siquiera vas a discotecas eres, además de pringado, un aburrido. Esto se puede aplicar a cualquier sitio y cosa, desde la forma de vestir hasta lo que haces en tus vacaciones. Si no haces lo que hace el resto eres un marginado y por la tanto, no eres feliz. Lo cual nos lleva a lo que hemos dicho anteriormente, has de gustar a los demás para ser aceptado socialmente y así conseguir ser feliz. Aunque ello signifique hacer cosas que realmente no harías y juntarte con personas con las que no deberías.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

El segundo modelo es menos común y implica menos cosas. Es, casi literalmente, lo contrario al primero. Es una parte de la sociedad que piensa que la belleza no influye para nada en tu felicidad, que alguien feo no tiene porque ser un infeliz; que los bienes materiales y el dinero son solo un plus en la vida, que lo mejor es conformarse con lo que tienes pero sin perder la ilusión por tenerlo o por conseguir algo que realmente deseas; y que en cuanto amigos, es mejor calidad que cantidad, porque tu puedes tener más o menos pero siempre han de quererte por cómo eres tú y no por como son ellos, que el donde estés y el que hagas no tiene nada que ver con la felicidad, que si lo haces es porque te gusta y quieres; y por último, que cada uno es feliz a su manera y con sus defectos, porque nadie es perfecto y nadie puede juzgar a alguien por cómo es feliz.

 

Nosotras apoyamos el segundo modelo de felicidad. Nos parece ridículo que la sociedad quiera que nuestra felicidad se base en tres factores que además de simples son superficiales, el corazón es lo que cuenta. Gente fea, gorda, con pocos amigos, que se encierra en su casa, que tiene poco… son personas igualmente y parece increíble que aun clasifiquemos a los demás como lo hacíamos hace siglos. Hay que dejar de lado lo material y pensar en lo espiritual.